
Estrella del fútbol universitario comparte hasta dónde llegaría para ‘hablar sobre Jesús’
Por Colaborador de Movieguide®
La estrella del fútbol de la Universidad de Nuevo México, Courtney Fernau, quiere compartir a Jesús, sin importar el costo.
Uno de los momentos decisivos en su carrera futbolística fue cuando se rompió el ligamento cruzado anterior — dos veces.
Pero a pesar de la dolorosa recuperación de cada rotura, Fernau lo haría todo de nuevo.
“Si tuviera que pasar por dos LCA de nuevo para tener la oportunidad de poder hablar sobre Jesús, lo haría”, dijo en el podcast “What’s Up” de Sports Spectrum. “Fueron recuperaciones largas; fueron dolorosas mental, física y emocionalmente, pero lo haría de nuevo por lo que Jesús ha usado. Y lo usó para su gloria en última instancia”.
Cuando se le preguntó cuál ha sido su parte favorita de la temporada, Fernau mencionó que su equipo está 5-1. Pero su parte favorita es algo mucho más duradero.
“Diría que esta temporada hasta ahora — de hecho tuvimos una noche de jóvenes adultos el miércoles de esta semana en la iglesia local a la que todos vamos, y tuvimos, creo, 14 compañeras de equipo en total que vinieron esa noche. Nuestro roster es de 34”, dijo. “Pero creo que 14 es la mayor cantidad de compañeras de equipo que han venido a las noches de adultos, así que diría que se siente como si hubiera un avivamiento sucediendo en Albuquerque. En mi equipo, yo y una de mis mejores amigas hemos estado hablando de lo alentador que es ver a nuestras compañeras de equipo venir y mostrar la disposición y simplemente mostrar la curiosidad por saber más sobre Jesús”.
Fernau jugó su partido de despedida como senior hace apenas unas semanas, y en una publicación reciente de Instagram, agradeció a Dios por cómo ha usado el fútbol en su vida.
“¡Verdaderamente una historia que solo Dios podría escribir!”, publicó en Instagram. “He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. 2 Timoteo 4:7.”
¡He cerrado oficialmente el capítulo de 16 años de fútbol en mi vida! Realmente no tengo palabras más que gratitud. Este viaje es un claro testimonio del amor interminable de Dios y su obra continua en mi vida a través de
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